domingo, 29 de enero de 2017

Antonia B. Taleti



la signorina e la contadina

Ella me preguntaba
canturreando:
Tu non hai bambole belle
da vestire, da spogliare?
Y yo decìa que no,
me avergonzaba de Marú
con el vestidito
cosido encima
los cabellos negros, rizados, 
¡Se parecìa tanto a mí!
Nadie
hablaba de Bullyng
pero se sufrìa lo mismo. 




Un hombre pequeño se sienta oscuro en el taburete de un sótano. Acaricia su barba como un diminuto duende maligno, mientras ejerce el poder sobre una baldosa y se sueña emperador de un mundo.




Oficiantes discretos

El que contempla paisajes
el que agradece la sombra
el que disfruta
la ducha caliente en invierno
el que seca la tabla del inodoro
que otro deó húmeda
el que ajusta la tapa de los envases
el que busca con afán
un papel instrascendente
y lee una vieja postal.




La muerte a cada instante
hurgando nuestras cosas
papeles, medias, piedrecitas.
Hasta que un dìa o una noche
al rastrear un libro, 
al abrir una puerta
la encontramos arrebujada
y nos mira.
Nunca perdona
que la hayamos sorprendido. 

                                                                 Para Sonia Cantardi.


de Còmplice en la mirada - Ediciones El Mono Armado 2014

miércoles, 25 de enero de 2017

Alejandro Mendez Casariego


El sueño

Escenario o montaje que se prepara para algo
que no se nos revela.
No están allí mis hermanos.
Mis hermanos cayeron en un hueco profundo.
Eso fue antes de la lluvia y las mudanzas
antes de que los juguetes fueran enterrados
antes de que el camión atropellara al perro
en la curva, a la salida del puente
Mis hermanos cayeron en un hueco profundo
y yo estoy allí, asomado, mirando el fondo
y escucho sus voces pero ya no los veo.
El escenario cambia
y estamos en la casa, como antes
estamos protegidos por el fuego
y por la voz de nuestra madre, que nos cuenta la historia
de los barbaros bajando desde el norte
sus mujeres montadas en grandes carretones
arrastrando pertrechos de otra vida.
Vuelve a cambiar el escenario y mis hermanos
ya no están. Se apagaron las luces y alguien toca
un acordeón en la distancia.
acariciamos al perro que se acerca
como devuelto por la oscuridad, está en la puerta
que ya no tiene cerradura ni bisagras
que agoniza desmontada y apilada
como todo lo que cae en desuso
canastos de mimbre pintados de verde militar
llenos de ropa doblada que parece más vieja:
mantas de tropa, borceguíes desolados
un arbolito de navidad y sus soplillos rotos.
Vuelve a cambiar el escenario.
hacemos una pila con todas nuestras armas
con los arcos las lanzas y las hondas
con las espadas templarias, los manguales, las dagas de madera
y les prendemos fuego.
Escuchamos, apagado, distante
el relincho de un caballo perdido.


de "Pieles Rojas"

domingo, 8 de enero de 2017

Contrapunto patagónico - Carlos Nuss - Ezequiel Murphy



les dejo una muestra del libro Contrapunto patagónico de Ezequiel Murphy / Carlos Nuss. Y una ayuda: Cuando sientan la necesidad de leerlo completo dirigirse a Carlos Nuss en Facebook o a los correos electrònicos de los autores: charlynuss@hotmail.com.ar
ezequielmurphy@hotmail.com. 

…el primero y segundo en hablar, no se resuelven del todo y al final felizmente el protagonismo queda, gracias a la causalidad, en la poesía…(fragmento del prólogo) Ezequiel Murphy / Carlos Nuss 

Clave de sol (clave de río) 

Caigo la sombra hasta el sol,
cadencia de sol, bemol de mí.
De mí esta sombra hecha de agua
más viva que el cuerpo que la traza.

Me pregunto / ¿Quién? 

¿Cómo se vive temeroso?
¿Cómo se vive a ciegas? ¿Sordos?
¿Cómo se vive cuidando quintita?

¿Quién surtirá agua en mis venas,
en las arterias a ningún lado?

¿Cómo se vive aferrado a la rutina?

¿Quién servirá soles en platos de tormenta?

¿Cómo se vive espiando la vida?

¿Quién se sentará a la mesa compartiendo las culpas y las sobras?

¿Cómo se vive sin preguntarse?

¿Quién ofrecerá la huella
a la hora de dar el paso?

Poética / Palabra guacha 

deseo de
escribir sobre los espacios vacíos
sobre las grietas y no sobre la roca
sobre las baldosas ausentes
sobre el hueco de la ventana
o el aire de la puerta
escribir sobre los silencios
escribir sobre las sombras
narrar lo que queda
entre lo narrado
las formas libres
que dejan los dibujos
buscar el negativo
escribir sobre el margen de la hoja
escribir sobre la luz que se filtra
a través de una cerradura
nada más o todo eso.

Darle soga a una idea
hasta que se convierte
en atadura
es enviar a la palabra a un cementerio
que no vuelve.
Las muertes no vuelven
a pesar de Tanatos;
son ellos o yo
pibe chorro del decir,
la palabra exiliada
a una villa de emergencia
con el miedo a hablar
bajando las persianas.
El silencio mordaza y la palabra capucha
tienen mejor efecto que cualquier corrector.
La autocensura es un arma invisible
en la nuca.
Las palabras y las balas
tienen su forma de consumar y consumir.
Mi boca queda guacha, baldía. 

Vencidos / Atávica 

El sonido se probó todas las bocas.

¿Qué cosas ya no dice?
¿Qué le será vedado?

¡Orden, dije orden! / Manada 

Ya dije
es ese
criterio ordenador
que no es Dios por supuesto.

Así como un santo no es todas las virtudes
ni el criminal todos los crímenes.

Urbana / La ciudad, un mundo


…La ciudad se transforma
como arrecifes de basura en degradación.
Los hielos se acumulan
para frenar los gritos,
y construyen barreras para las canciones./

…La mañana toca bocina en los corazones
mientras la tarde prueba su traje de muerte,
ajustando el dobladillo de las costureras
para hacer las paces a la luz de las velas…

Verbillos efímeros / Refrán por arrebato 


A huir llamarle nuevo camino,
al camino llenarlo de bruma,
a la bruma de sinsentido,
el sinsentido en ruido.

...y cuchillos que sueñan filos
carne abajo

Pulsión / Destruxión

 El universo cayó en picada sobre su cabeza,
lo arrojó en el fondo de gargantas rotas;

Las cosas no dichas se filtran
como lo hace el agua

Esclavitud /
Grito adentro de la tierra afueracursiva

Embotellaré el agua
y contaminaré los ríos,
comprarás mi agua,
no beberás la libertad
solo yo abriré
el grifo de tu dignidad.

Errar es humano / Errado

Prefiero seguir errando
prefiero en ese afán
incinerarme a lo bonzo

a pasparme quieto
a morir de musgo
a herrumbrarme

tragar la hostia con culpa
de no sentir a dios en la lengua,


sábado, 7 de enero de 2017

La lectura y creación literaria en las redes sociales - Carlos Nuss




¿Qué nos motiva a leer? ¿Qué nos impulsa a escribir? Darle a la palabra el poder de los seres y las cosas.

¿Cuántas veces hemos escuchado decir "los jóvenes leen menos por culpa del internet, del facebook"?

Esta última pregunta puede funcionar como hipótesis, falsa o no. En la actualidad las redes sociales tienen una presencia sociológica y mediática quizás desmesurada. Esa presencia también ha afectado a la literatura, el acercamiento a ella y la creación propiamente dicha. Mi propósito es intentar realizar un acercamiento a estos conceptos, lograr un entendimiento sobre el tema.

La primera red social con importancia literaria fue el "blog" (diario en linea). Creados en 1997, llegó a más de 150 millones de usuarios en 2011. Es una herramienta sencilla y cómoda, de base textual, con la posibilidad de incluir fotos y videos. Muchos creadores empezaron a usarlos para compartir sus textos y sus experiencias artísticas o no. Muchos blogs están escritos en forma de diario íntimo (aunque el blog es público).

Pero el verdadero desarrollo global y masivo de las redes sociales llegó con Facebook y Twitter. El primero llegó a 800 millones de usuarios en 2012. Aunque ambas redes son de perfil comunicativo, también han sido usados (sobre todo por los usuarios jóvenes) para temas relacionados con la literatura, ya sea creando enlaces hacias páginas web o blogs literarios o usados específicamente para la creación y difusión literaria. Esto se nota en la profusión de páginas de difusión, grupos de conversación y debate, la creación de antologías en linea de autoría disuelta o colaborativa (a esto último la Doctora en Filología Hispánica y Profesora de Literatura Española en la Universidad de Valladolid teresa Gómez Trueba le ha llamado "hiperficción": 'En este tipo de ficciones constructivas o colaboracionistas siempre hay alguien que controla no la narración pero sí la interacción, estableciendo unas reglas del juego. Por su parte, la hiperficción explorativa puede tener un solo autor, pero a través del sistema de hipertexto crea una ficción que puede ser leída en múltiples direcciones, de tal manera que se le permite también al lector tomar decisiones sobre sus trayectos de lectura, eligiendo qué nexos establecer en cada momento'. Este tipo de lectura tomando decisiones ha sido comparada con la que ofrecen los libros juveniles del tipo “Elige tu propia aventura”.
Pero la novedad no termina: no sólo existe una ruptura generacional con respecto al acercamiento a la literatura a través de formatos digitales. Es también una ruptura de usos y formas. En la gran mayoría de los casos, la ordenación cronológica de los textos es inversa a la tradicional, por las características propias de las redes (el lector se encuentra primero con lo que fue escrito último). Se usan estructuras rizomáticas, es decir, sin subordinación jerarquica, donde los enlaces abren la posiblidad de saltar de un texto a otro, el uso del hipertexto como de las etiquetas es habitual. El joven escritor mexicano Renato Guillén Durán, escribe mini ficciones de 140 caracteres en Twitter. Por su parte Mauricio Montiel Figueiras, también mexicano elaboró un experimento de creación literaria a través de la cuenta de Twitter @Elhombredetweed, en el cual le fue posible desarrollar una novela de casi 500 páginas que gira en torno a un personaje ficticio creado en el internet. Hay escritores que van aún más lejos: Según el escritor Paulo Coelho, las redes sociales son el futuro de la literatura y Twitter es un arte, ya que “en 140 caracteres se tiene que pasar toda una idea y eso en este momento ayuda muchísimo al escritor a sintetizar sus ideas”. “En las redes sociales tienes que tener contenido y la forma es secundaria”, dijo.

Por otro lado, las redes sociales funcionan como un mecanismo tanto de experimentación literaria como de comunicación del escritor con el lector. Son varios los escritores que tiene este tipo de conexión con sus lectores.

Sin embargo, no voy a descubrir nada nuevo si digo que las redes sociales funcionanan como herramienta de marketing, un estudio de mercado a escala global sobre gustos y preferencias de millones de usuarios, datos que son vendidos a las grandes corporaciones. Esto, en la literatura se traduce en conductas que llevan a priorizar la socialización del texto más allá del texto en si. Manierismo, imitación colectiva, adaptación del mensaje intelectual y estético a las exigencias de la autopromoción online, la provocación de comportamientos patólogicos que surgen del seguimiento estadístico del nivel de impacto de los cuantificadores de popularidad, rasgo que quizás nunca antes los escritores hayan vivido de manera tan vivencial. El lector tiene mucha más incidencia sobre el texto escrito a través de las redes: comenta, comparte, crítica. ¿Es esto favorable para quien escribe? A primera vista, sí. Después, está en cada uno de los que escribe separar la arena de las piedras.

Soy de la opinión que lo más importante es que se lea, que el texto llegue al lector. Después, lo que este último haga es incontrolable. La interpretación es siempre personal, no es unívoca, y creo que está bien que así sea. Pero también puede suceder que el lector participe activamente en el texto, usando las herramientas digitales (cortar, copiar, pegar), para recortar o fragmentarlo, modificando irremediablemente el texto . Es parte del riesgo de la socialización del texto, riesgo asumido por la gran mayoría de los escritores online. Pero no es el único riesgo.

Decía Alejandra Pizarnik en su diario, mucho antes que cualquier red social fura siquiera una idea, que Julio Cortazar no era tanto un gran escritor, sino un gran plagiador, en referencia a su gran habilidad para tomar influencias, a ciertas similitudes de sus textos con los de otros escritores no traducidos al español en la mitad del siglo pasado, disimular el plagio, consciente o no. Tanto la copia disimulada como el plagio descarado son casi inevitables si se publica en una red social un texto, sin registrarlo intelectualmente. Es un riesgo asumido por la mayoria de los escritores online. Soy de la opinión que lo más importante es que se lea, que el texto llegue al lector. Y que así como el mundo no dejará de ser mundo por un texto más o uno menos, el verdadero lector seguirá leyendo más allá de egos y autorías. ¿Para qué escribimos? Para que nos lean . Creo que más importante que el autor es el texto, y la interacción del texto con quien lee.

Y aquí está la otra pata de la historia: ¿Cómo se lee a través de las redes sociales?

Considero que así como se escribe rizomáticamente, sin una linea jerárquica o estructural determinada, también así se lee. Es verdad que se lee más con la masificación de internet y a través del uso las redes sociales. Pero, ¿cómo se lee? Fragmentariamente, frases, parrafos descontextualizados son abundantes en toda la red. Frases de Jaime Sabines, Julio Cortazar y Luis Cernuda (por citar sólo unos pocos ejemplos) nos las encontramos a diario en la red. En mi experiencia personal he comprobado que los textos largos generalmente suelen ser los menos leídos; qué signifca ese dato, es una  conclusión a la que cualquiera puede llegar. Estadisticamente está comprobado que los jóvenes usan las redes sociales para informarse, en su mayoría no leen diarios, mucho menos son los que leen libros. pero se lee, mucho más que a través de toda la historia. Todas las redes sociales establecen sus criterios de publicación y almacenamiento. Algunas, como Facebook, se rigen además por estrictos criterios de visibilidad. Ante este panorama, los blogs siguen siendo la única alternativa real para no quedarse con la primera impresión, con la imagen bonita, con la frase o párrafo del momento. Las redes sociales sirven de difusión y para la fidelización, quizá también como escaparate en el que darse a conocer. Pero lo cierto es que la inmensa mayoría de los usuarios no lee, porque ni puede ni quiere, más allá de su propia red social. ¿Está bien esto, está mal? No soy yo quién para decirlo.


Creo que las redes sociales han (valga la redundancia) han socializado la literatura, que han creado una nueva relación entre escritor y lector, y que se lee más a través de ellas. Queda en el debe la forma en que se lee. Y también en la que se escribe.-


jueves, 5 de enero de 2017

Soledad Alvarez


clase de religión

Dicen que Dios está en todas partes
que todo lo ve.
¿Estás en todas partes, Dios
todas las guerras el hambre viva los estómagos
embalsamados
el ojo inmenso
de cíclope insomne de Dios, lo ve?
La sangre en la cisura brutal del estupro
el puñal del asesino la ferocidad del malestar
¿y no se espanta Dios, no llora, no toma partido
la eternidad imperturbable?
Lo nimio también lo ve Dios.
La araña tejiendo el hilo de seda para la presa
la hormiga en busca del alimento
¿también a mí me mira cuando me miro desnuda
frente al espejo
cuando me peino fumo a escondidas quiero matar
y me avergüenzo?
Perdí la virginidad bajo la mirada de Dios.
El gran voyeur.


fuente: Liliana Hayat en Facebook

miércoles, 4 de enero de 2017

Guillermo Samperio


...Al doblar en el callejón de su casa, sintió que el ojo enorme se encontraba ya sobre sus cabellos, su rostro, su bufanda, su suéter, sus pantalones. Se detuvo y le vino una especie de vértigo semejante al que se experimenta en los sueños en que la persona flota sin encontrar apoyo ni forma de bajar. Ofelia sabía que estaba a unos cuantos metros de su casa, en Coyoacán, en su ciudad, sobre la Tierra, pero al mismo tiempo no podía evitar la sensación del sueño, ese vértigo a final de cuentas agradable porque el soñador en el fondo entiende que no corre peligro y lanza su cuerpo a la oscuridad como un zepelín que descenderá cuando venga la vigilia. Ofelia siguió parada en el callejón, intentando entender; en voz baja se dijo: “No es un desmayo ni un problema psíquico. Esto no viene de mí, es algo ajeno a mí, fuera de mi control”. Se movió lentamente hacia la pared y recargó la espalda. La sensación se hizo más densa en su delgado cuerpo, como si la niebla del callejón se hubiera posado en ella. “Ya no es que me estén observando; es algo más poderoso.” Se llevó una mano a la frente e introdujo sus largos dedos entre el cabello una y otra vez; sobresaltada, comprendiendo el hecho de un solo golpe, se dijo: “Estoy dentro del ojo”...

fragmento de "ella habitaba un cuento"  (fragmento)